El juez de garantías de la localidad bonaerense de Avellaneda Luis Carzoglio, quien decidió rechazar la detención de Pablo Moyano pedida por el fiscal Sebastián Scalera, rompió el silencio y en diálogo exclusivo con Mañana Sylvestre advirtió sobre los aprietes mediáticos de los que estaría siendo víctima a causa de su fallo.
“Estoy muy tranquilo pese al precio que tengo que pagar”, dijo Carzoglio en Radio 10 y habló también de las amenazas telefónicas recibidas.
“No es un justo que trabajando decentemente y en forma transparente uno tenga que atravesar estos momentos. Mi esposa tiene dos operaciones de columna y una doble imposición de cadera y me dijeron ´si la queremos matar, la empujamos”, precisó.
Puntualmente sobre el caso Moyano, Carzoglio comentó: “Actué en función de mi firme convicción, he sido imparcial. Resolví lo que resolví porque creo que es así y estoy convencido de haber resuelto correctamente”.
Carzoglio evitó confrontar directamente con el procurador general de la provincia Julio Conte Grand, y refirió: “No voy a juzgar del Procurador, sólo hablo de la Procuración en general, porque eso es un mundo”.
“Conte Grand me conoce mucho y bien. Tuve 2 reuniones con él y las pedí para aportar para un mejor ministerio público fiscal”, refirió.
Luego prosiguió: “Lo que cuestiono son las presiones mediáticas que me hicieron explotar el otro día. El poder judicial no es una isla en un país en crisis, y en este sentido hay que fortalecerlo”.
En relación a las acusaciones que se imputan acotó que “ya tengo un jury de enjuiciamiento pero estoy muy tranquilo. Todas las imputaciones que salen en La Nación y Clarín el 50% son falsas y ya están los descargos en la Corte y cada una tiene su explicación”.
Viernes 19 de octubre de 2018
