Las recientes declaraciones del Presidente Mauricio Macri sobre la actualidad de Aerolíneas generaron polémica y despertaron preocupación por una eventual posible reprivatización de la compañía de bandera.
«Es cierto que todos los meses hay argentinos que vuelan por primera vez, pero aún sigue siendo menos del 5 por ciento de la población. No es justo que el 95 por ciento de los que no lo usan tengan que pagar para que funcione», había dicho Macri en un acto en el partido bonaerense de Pilar.
En Mañana Sylvestre opinó el legislador porteño por Unidad Ciudadana, y ex titular de Aerolíneas Argentinas, quien sostuvo que el Gobierno está privatizando el espacio aéreo, abriendo el juego a nuevas empresas privadas que están desplazando a la empresa estatal del mercado aéreo.
“Creo que el plan del gobierno quedo evidenciado a fines de 2016 cuando echaron a Isela Costantini. No quieren privatizar Aerolineas, ni venderla sino privatizar el transporte aéreo y lo vienen haciendo llenando el mercado de empresas privadas, que vayan paulatinamente desplazando a Aerolíneas”, sostuvo.
Recalcó que Aerolíneas perdió participación en el transporte aéreo local, porque con la salida de la anterior gestión tenía asegurado el 82% del mercado y ahora está en tan solo 65%.
“Hicieron que la gente compre pasajes en aerolíneas privadas y deje de comprar en Aerolíneas Argentinas. Algo así pasó en Brasil con Varig, que cerró y solo vuelan internamente líneas privadas, pero ahora hay 50 ciudades sin vuelos en el país vecino”, precisó.
Agregó que “es una política que apunta a concentrar el mercado en pocas manos, y terminan decidiendo los empresarios privados qué ciudades tienen vuelos, y cuáles no” y recordó lo que ocurrió en los ´90 cuando el transporte aéreo privado presionó y agobió a Aerolíneas, y terminaron todas “fundidas”, incluida la compañía estatal.
A la par consideró que el rol de Aerolíneas Argentinas “es fundamental para el desarrollo económico, y la integración del país, porque si no hay vuelos, no viene ninguna inversión ni hay desarrollo de las industrias”.
En el cierre de la entrevista, Recalde dejó entrever una dosis de“cinismo” en el discurso del primer mandatario ya que olvida decir que todas las empresas áereas privadas reciben subsidios del Estado, incluida la ex McAir, que era propiedad de la familia presidencial.
“McAir siempre vivió de subsidios, y volaba a ciudades donde el intendente o el gobernador le garantizaba con subsidios llenar los aviones”, precisó.
Viernes 9 de noviembre de 2018
