En AM1030 Radio Del Plata, Gustavo Sylvestre conversó en extenso con el sociólogo Carlos De Angelis, a cargo del Centro de Opinión Pública de la UBA, quien dio detalles del reciente estudio de campo que desarrolló y que muestran las consecuencias directas de la suba de tarifas en la economía familiar de los argentinos.
“Se hizo sobre la base de 1097 casos en Capital Federal y Gran Buenos Aires y nos sorprendió un poco la magnitud de la cuestión porque el 71,1% dice que está con dificultades para abonar los servicios públicos y solo el 23,9% no tiene dificultades. Y cuando se le pregunta si va a tener que recortar gastos para pagar las facturas el 77,7% dice que si”, apuntó el investigador de la UBA.
“La situación abarca no solamente a sectores pobres, sino también a amplias clases medias, que van a tener que hacer cambios en la composición de los gastos de hogar porque de lo contrario le cortarán el servicio”, indicó.
“Hay una cierta resignación y también enojo, porque si les preguntan si van a mejorar los servicios públicos por pagar 400 veces más, el 56,2% dice que no, y el 54,8% piensa que van a seguir los aumentos, mientras que solamente el 12,7% dicen que no van a seguir”, agregó De Angelis.
Respecto de la opinión de los encuestados sobre la necesidad o no del ajuste tarifario, el 66,5% de los consultados dijo que sí “eran necesarios pero exagerados”, mientras que un 20,6% aseguró que no lo eran, y un 12% adhirió plenamente al ajuste impulsado por Cambiemos.
Además, De Angelis remarcó que un 54% de los encuestados admitió estar viendo la posibilidad de endeudarse con familiares o amigos para afrontar sus gastos corrientes. En ese sentido, el sociólogo advirtió por el impacto que pudiera tener este ajuste, y preanunció mora eventuales “en el pago de expensas o en la cuota del colegio” de los chicos.
El investigador también puso el foco en los recortes que las familias implementarán en su vida cotidiana, y subrayó que el 45% dijo que eliminará las salidas a comer en restaurantes. Por otra parte, «un 45% de los consultados está reduciendo la calidad del consumo de la carne, y comienza a correrse el consumo de cortes más caros a los más económicos, sin hablar del 20% está abandonando el consumo de carne porque ya no puede comprarlo”, expresó.
Por último respecto del panorama a futuro de la economía del país, según De Angelis, el 31% de los encuestados dijo estar “preocupado”, un 11% desesperanzado, un 20% indignado, mientras que solo un 20% dijo estar “esperanzado” y un 5%, “feliz”.
Martes 2 de agosto de 2016
