Aníbal Fernández habló con Radio Del Plata, y dejó explosivas declaraciones contra Diego Bossio, exdirector de ANSES durante la gestión de Cristina Kirchner, a quien volvió a acusar de “traidor”, y de canjear apoyo político al gobierno de Macri a cambio de “impunidad”.
“En el caso de Bossio, él tiene que votar puntualmente para decidir qué va a suceder con este tema (por el acuerdo con Buitres), está jugando con una posición política que él integraba en la propuesta electoral que ofrecíamos a la sociedad argentina, y que ahora él se desprendió para hacerle de alcahuete a cambio de impunidad al gobierno de turno”, disparó Aníbal Fernández sobre el exlegislador K y ahora jefe del bloque justicialista.
Ante la consulta acerca de si sus acusaciones hablaban de eventuales actos de corrupción de Bossio, en su paso por ANSES, Fernández evitó ampliar sus dichos y señaló: “Es por protección, el tiempo lo va a demostrar”
“Bossio era un alcahuete de los números 1 y hoy en un acto de traición pocas veces visto, antes de cumplirse 2 meses del cambio de gobierno había transado por impunidad. Estudié y conozco el tema, él (por Bossio) cambia impunidad por quorum, por manos levantadas en lo que va a prender fuego a Argentina, no tienen vergüenza”, precisó el exsenador.
Respecto a supuestas aprietes políticos venidos desde el oficialismo para tratar el acuerdo con Buitres en Diputados, Fernández indicó que “el Gobierno habla por sí, y a través de banqueros importantes con gobernadores, para que presionen a legisladores para que se sienten a discutir esto”.
El pago a Buitres
En relación al acuerdo alcanzado por el Gobierno con los holdouts por parte de la deuda en default, el exfuncionario kirchnerista se mostró contrario al convenio y alertó sobre los riesgos de un reclamo futuro de los bonistas que en forma mayoritaria aceptaron el canje de deuda.
“Se va a poner a Argentina ante uno de los peores riesgos difíciles de salir, porque el 92,4% cuando salga a reclamar trato igualitario, va a significar entre US$500.000 millones y US$800.000 millones, casi un PBI, para romper Argentina definitivamente”, culminó.
Jueves 10 de marzo de 2016
