Daniel Llermanos habló en Mañana Sylvestre sobre la delicada situación que vive hoy el poder judicial por la sucesión de presiones y aprietes del ejecutivo contra magistrados, que tendrían como objetivo la persecución de dirigentes opositores.
“Hugo Moyano se presentó en sede judicial como querellante, y tiene como juez a Ariel Lijo y el querellado es el Presidente de la Nación. La presentación fue realizada 24 o 48 horas después de que Gustavo Arribas admitiera el encuentro de sus espías, el titular de la oficina de asuntos legales, el contador Juan Destéfano, que fue una de las dos personas que visitaron a Carzoglio», expresó Llermanos sobre la denuncia presentada por su cliente, el titular del sindicato de Camioneros.
Luego, Llermanos habló de las eventuales presiones sufridas por el juez de Avellaneda Luis Carzoglio, en el marco del intento del Gobierno por encarcelar a Pablo Moyano.
“La causa para intentar desaforar a Carzoglio es bochornosa. Inicialmente tenían mayoría absoluta contra Carzoglio pero ahora no consiguen la reunión en el Consejo de la Magistratura. Ahora no se animan ni a suspenderlo en el cargo ni a quitárselo. Es una vergüenza, y es evidente una maniobra”, apuntó sobre los intentos para correr del medio al magistrado.
«La AFI y el Ministerio de Seguridad están yendo contra los Moyano, eso lo probamos. Hoy la división de poderes es una ficción”, reflexionó el letrado.
Jueves 6 de junio de 2019
