El Papa Francisco sorprendió a la grey católica y al mundo entero al avalar la existencia del matrimonio igualitario.
“Las personas homosexuales tienen derecho a estar en una familia, son hijos de Dios, tienen derecho a una familia. No se puede echar de una familia a nadie, ni hacerle la vida imposible por eso», dijo el Pontífice en una entrevista televisiva.
Al respecto, en Mañana Sylvestre opinó el sacerdote católico Juan Carlos Molina, y valoró el espíritu revolucionario que impone Francisco a su liderazgo religioso.
“Francisco ha venido dando gestos para dentro y para afuera de la Iglesia. Es un bombazo pastoral muy fuerte. Es una revolución pastoral, y de amor. Lo que Francisco está diciendo es que tengan derechos que es mucho más que no lo condenamos ni los excluyamos”, expresó Molina en Radio 10.
“Le está diciendo a la Iglesia misma que debemos empezar a repensarnos sobre un montón de cosas y una de ellas es esta, qué vamos a hacer con nuestros hermanos gays. Y Francisco lanza estas frases que nos son casuales. La primera vez la tiró en un avión diciendo: ‘¿Quién soy yo para juzgar a los gays?’. De ahí en adelante empezó a dar estos pequeños gestos, de recibir a familiares, de recibir a parejas gays con hijos, de juntarse con chicas transexuales”, refirió.
Sin embargo, Molina puso un marco a las declaraciones del Pontífice y aclaró que esto no impactará en la doctrina de la iglesia.
“La declaración del Papa Francisco no es doctrina, no cambio el código de derecho canónino, no cambio la biblia. Los gays no van a entrar a la iglesia y se van a casar, no nos van a venir a pedir por favor que los casemos, eso no va a pasar», explicó.
“Hay gente que se ha rasgado las vestiduras por estas palabras de Francisco. Lo que Francisco ha tenido siempre son estos bombazos pastorales, estos fogonazos pastorales para adentro y para afuera. Esto ha desatado un quilombo dentro de la iglesia impresionante», remarcó.
Jueves 22 de octubre de 2020
