Durante un asado con un grupo de integrantes del Cuerpo de Granaderos el Presidente Macri fue protagonista de un papelón al asegurar que Bernardina Rivadavia había sido el impulsor del regreso al país de los restos de José de San Martín.
“Cuando los trajo Rivadavia de vuelta los restos de San Martín, eran solo siete los que aparecieron solos con el uniforme a cuidarlo toda la noche”, indicó erróneamente Macri.
“Rivadavia muere en Cádiz en 1845 mucho antes que San Martín que lo hace en Boulogne Sur Mer en 1850, con lo que es imposible que él que traiga sus restos”, comentó en Mañana Sylvestre el historiador Felipe Pigna, quien remarcó la mala relación política que ambos próceres tenían en los comienzos de la patria. «Fueron enemigos viscerales, y acérrimos», puntualizó.
“Primero hay que decir que San Martín y Rivadavia fueron enemigos históricos. Junto con Alvear, Rivadavia hizo todo lo posible por demonizar su figura, hacerle la vida imposible. Incluso, Rivadavia hizo todo lo posible para evitar su encuentro con Bolívar. Como San Martín pide ayuda a su país, para concluir la guerra en Perú, Rivadavia se lo niega aduciendo que eso sería la gloria para San Martín y lo convertiría en el futuro presidente cuando se reúna el congreso en 1824”, recordó Pigna.
“Rivadavia es el propulsor del exilio de San Martin, le pone espías, lo persigue, y le hace una demanda judicial”, subrayó.
Además, remarcó que los restos de San Martín se repatriarán 30 años después de su muerte, es decir en 1880 momento en Nicolás Avellaneda era el presidente del país.
“Es una lástima que los presidentes sepan poco de historia argentina, serviría para comprender el presente”, culminó Pigna en Radio 10.
Lunes 19 de marzo de 2018
