En Mañana Sylvestre, el ex diputado nacional y actual titular de Consumidores Libres sostuvo que los aumentos en las tarifas de gas y de electricidad deben ser aprobados primero por el Congreso antes de entrar en vigencia. Y criticó también el manejo que hace el Gobierno del transporte público, en particular de los ferrocarriles.
“Yo lo que considero es que bajo el eufemismo de un cargo específico en realidad se trata de un impuesto que como tal tiene que ser aprobado por el Congreso Nacional. La Constitución Nacional en ese sentido es muy clara, porque toda carga impositiva tiene que surgir del Congreso, tiene que tener origen en la Cámara de Diputados y ser aprobado por el Congreso”, dijo Polino sobre en las tarifas de electricidad y gas que rondarán entre $4 a $150 pesos en los domicilios y hasta $300 en los comercios, y que fueran anunciados la semana pasada en conferencia de prensa por el ministro de Planificación Julio de Vido y el viceministro de Economía Axel Kicillof.
“Además se está haciendo retroactivo al 1° de noviembre y según lo que anunció el ministro se piensa recaudar durante el año $2.000 millones en la Ciudad de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires en las áreas de Edenor y Edesur y el gas natural en todo el país. Y todo va a salir de los bolsillos de los usuarios y tienen que cumplirse con las formalidades que plantea la Constitución Nacional”, sostuvo.
“El subsidio tiene que ser para aquellos usuarios que no tienen capacidad económica para pagar una tarifa plena pero no se puede estar subsidiando a usuarios como empresas petroleras, hipódromos, casas de bingos, y a usuarios residenciales de Puerto Madero y de Barrio Parque, de countries con pileta climatizada. Me parecía bien esa política que había comenzado en el mes de enero de este año que en lugar de subsidiar a las empresas hacerlo con los usuarios que más lo necesiten”, añadió.
En Radio La Red, el ex diputado socialista refirió que “se interrumpió esa política después de la tragedia de TBA en Once. Y a partir de ahí la mala prestación de los servicios públicos por la falta de control de los subsidios que se entregó a TBA. Los Cirigliano continúan operando a través de la UGOFE, las ex empresas Rocas, San Martín y Belgrano Sur”.
Luego volvió a cuestionar la política de manejo de los servicios públicos y dijo que “se toman medidas espasmódicas no hay un plan orgánico que se cumple por etapas sino que en función de las circunstancias se van tomando medidas como bomberos voluntarios, en lugar de haber una planificación general”.
Lunes 26 de noviembre de 2012
